1 d’abr. 2022

Iván Illich: "La gent exigeix ser curada de l'ancianitat."

Iván Illich va publicar el 1974 Nèmesi Mèdica, un text que en el seu moment va provocar un gran impacte, i que més tard va anar quedant arraconat, en part a causa d'algunes limitacions del text, i en part a causa "de la voluntat social d'ignorar" les idees incòmodes que exposava en el llibre, i que es podrien resumir així: "L'excés de medicina és perjudicial per a la salut". De fet, aquelles idees incòmodes avui segueixen sent incòmodes (potser encara més, amb l'elevació actual de la "supermedicina tecnològica" a la categoria de religió) i, per tant, el text d'Illich segueix sent vigent (tenint en compte, tal com he dit, que també té algunes limitacions). 

Per exemple, el text és del tot actual quan parla de la gestió de la vellesa i l'obsessió per allargar vides completament degradades i prolongar agonies absurdes. En cito alguns fragments. (1)

"La demanda de asistencia a la vejez ha aumentado, no sólo porque hay más ancianos que sobreviven, sino también porque hay más gente que exige ser curada de la ancianidad." 97

"La terapéutica alcanza su apogeo en la danza de la muerte en torno al paciente terminal. A un costo que varía entre 500 y 2.000 dólares diarios [1974], celebrantes vestidos de blanco y azul envuelven en olores antisépticos lo que queda del paciente. Mientras más exóticos sean el incienso y la pira, más la muerte se mofa del sacerdote. El uso religioso de la técnica médica ha llegado a prevalecer sobre su propósito técnico, y la frontera entre el médico y el empresario mortuorio se ha borrado. Las camas están llenas de cuerpos ni muertos ni vivos." 107

"La medicalización de la asistencia terminal no sólo ritualiza sueños macabros sino que extiende la licencia profesional para actos obscenos: la escalada de tratamientos terminales libra al médico de toda necesidad de probar la eficacia técnica de los recursos que maneja." 108

"El rechazo del médico a reconocer el punto en el que ha dejado de ser útil como curandero y a retirarse cuando la muerte se nuestra en el rostro de su paciente, ha hecho de él un agente de la evasión o del disimulo descarado. La falta de voluntad del paciente para morir a solas lo ata a una dependencia patética. Ha perdido ya la fe en su habilidad para morir, forma terminal que la salud puede adoptar, y ha convertido en importante tema de debate el derecho a que lo maten profesionalmente." 109

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(1) Irrecuperables, 2021. Inclou un pròleg dels editors molt adequat, altres textos d'Ilich, i un escrit de David Cayley que relaciona el text d'Illich amb la pandèmia de la covid.